Ingredientes: 1 lata de piña, caramelo liquido, 3 huevos 250 gr. de azúcar, 300 gr. de harina, 200 ml de leche, 100 gr. de mantequilla, 1 sobre de levadura.
Supongo que depende de la marca de la piña, pero yo tuve que usar lata y media de las pequeñas, solo venían 4 rodajas en cada lata… aunque no me importó porque compré un pack de 3. Lo digo por si pilláis una suelta y luego os quedáis cortos.
Hacemos la masa del bizcocho con los ingredientes mezclando primero los ingredientes húmedos y a continuación los secos y reservamos.
Para hacer el caramelo poner en una sartén 3 cucharadas soperas de agua y 3 cucharadas soperas de azúcar, dejar reducir hasta que se dore. Ojo! no pasarse mucho porque cuando más oscurito llega un punto en el caramelo resulta demasiado fuerte y tiene como un fondo amargo.
Poner el caramelo en el fondo del molde y después las rodajas de piña.
Verteremos encima la masa y introducimos en el horno a 180º durante 45 minutos, dependiendo del horno. Pinchar con un palito y si no sale limpio dejarlo un poco más. No desmoldar hasta que se haya enfriado, para que no se rompa y salga entero.
Queda muy rico, pero un poco seco. Me gusta más hacer un preparado del zumo de piña de las latas con unas cucharaditas de ron al gusto, (en mi opinión mejor suavecito, solo con un toque, así que con un chorrito de nada ya vale), y luego regar cada ración en el plato con este preparado. Hacerlo un rato antes de comer para que se empape bien y el bizcocho chupe todo el líquido.
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